47 - BIBLIA HABLADA - 2 CORINTIOS (RV-NT)


Corintios, 1 y 2. La primera carta a los Corintios fue escrita por Pablo desde Efeso, en su tercer viaje misionero (Hechos 19:1; 1 Corintios 16:8, 19), probablemente en el año 56 o 57 d. de J.C. Había escrito anteriormente una carta a los corintios que no nos ha llegado a nosotros; en ella les había advertido de no asociarse con personas inmorales (Hechos 5:9).
En respuesta, Pablo recibió una carta (Hechos 5:10; 7:1; 8:1) en la cual ellos declaraban que era imposible seguir su consejo sin salirse del mundo, y pusieron a su consideración una cantidad de problemas sobre los cuales solicitaban su opinión. Entre tanto, Pablo había oído de facciones en la iglesia (Hechos 1:11). Estas circunstancias diversas lo guiaron a escribir 1 Corintios.
Después del saludo introductorio (1 Corintios 1:1-9), Pablo discute (1) las disensiones, 1 Corintios 1:10—3:23; (2) su propio ministerio, cap. 4; (3) el incesto, cap. 5; (4) los creyentes llevando a otros creyentes a las cortes paganas, cap. 6; (5) el matrimonio cristiano, cap. 7; (6) la carne ofrecida a los ídolos, caps. 8—10; (7) el cubrirse la cabeza las mujeres, 1 Corintios 11:2-16; (8) la correcta celebración de la cena del Señor, 1 Corintios 11:17-34; (9) el uso y abuso de los dones espirituales, especialmente las lenguas, caps. 12—14; (10) la resurrección del cuerpo, cap. 15; y (11) colectas para los pobres en Jerusalén, 1 Corintios 16:1-3; concluyendo con algunas notas sobre sus planes personales y saludos, 1 Corintios 16:4-24.
Segunda Corintios fue escrita por Pablo en su tercer viaje misionero en algún lugar de Macedonia. Los maestros judaizantes habían procurado desacreditar al Apóstol y habían logrado que la iglesia como un todo se pusiera en contra de él. Esta rebelión motivó a Pablo a hacer una breve visita a Corinto (2 Corintios 12:14; 13:1, 2), pero la visita no restauró su autoridad. Más tarde Tito llevó a Pablo un informe de que una vez más se reconocía su autoridad; este informe dió lugar a que escribiera 2 Corintios.
Esta segunda carta es menos metódica y es el escrito más personal de Pablo. Es muy autobiográfica y cae naturalmente en tres divisiones principales:
(1)   Algunos pensamientos sobre la crisis por la cual la iglesia acababa de pasar, caps. 1—7;
(2)   completar la colecta para los pobres en Jerusalén, caps. 8—9;

(3)    una defensa del ministerio de Pablo contra los ataques de sus enemigos y vindicación de su apostolado, caps. 10—13.

Comentarios